Luz cálida o fría.
Antiguamente cuando íbamos a comprar una luminaria para nuestro hogar, no teníamos dudas sobre el color de la bombilla, puesto que normalmente todo funcionaba con bombilla tradicional o con bombilla halógena, así que no debíamos preocuparnos por si la bombilla tenía un color u otro, únicamente si la bombilla era de buena o mala calidad.
Hace unos años atrás, se comenzó a utilizar el bajo consumo y aquí comenzaron las dudas, cálida o fría ? , mucha gente con la llegada del bajo consumo, se pasó al color frío (el color del fluorescente), básicamente por que la sensación lumínica hace que parezca que da mas luz y , en parte, es cierto pero no tanto como nos parece (este tema lo tocaremos en otro post), pero no a todo el mundo le gusta, ni en todos los lugares de la casa es apropiado, veamos las características de cada uno.
Para empezar explicaremos como se denominan los grados de luz que dan las tonalidades, el nombre que reciben es Kelvin y se representan con una K al final de los números, que son los que denominan el grado del color de la luz.
Así pues la luz cálida, está comprendida entre los rangos de 2700 K y 3500 K, la neutra oscilaría entre los 4000 K y 5000 K y la fría sería más allá de los 5500K o 6000K.
En el siguiente gráfico, podéis ver explicado y con detalle, los diferentes colores de la luz.
Y una vez llegados a este punto…..que luz me interesa??
La luz cálida relaja, hace sentirse a gusto, cuenta con mayor profundidad y énfasis de los detalles, es perfecta si buscamos ese ambiente de hogar, tenemos colores ocres o marrones, pantallas de tela o muebles de madera.
La luz fría por el contrario, sobrestimula, no diferencian relieves y aplanan la visual por su luz uniforme, para ambientes en blanco y negro o grises, tonos azulados, oficinas, cocinas, cuartos de baño y zonas de trabajo es perfecta.
La luz fría desprende un tono azulado, se parece mucho a los faros de xenón de los coches, así que nosotros normalmente recomendamos, para el cliente que no quiere una luz cálida, bombillas o aparatos de luz que oscilan entre los 4000K o 4500K, sobre todo si va a colocar el aparato en alguna habitación del hogar, para cocina o cuarto de baño podríamos trabajar con 5000K o 6000K .
Así ya tenemos una pequeña noción de que es el grado de color de la luz y para donde podemos utilizarla, aunque siempre hemos de tener en cuenta el gusto del consumidor, que es quien al final decide el color de la luz.